RSS
 

DE CARA A LAS FUNCIONES DE INVESTIGACIÓN DOCENTE EN EL SIGLO XXI

  Dra. Doris Colina de Andrade 
URBE – Universidad Privada Dr. Rafael Belloso Chacín
dorisdeandrade@gmail.com

Dra. en Ciencias Políticas. MSc. en Ciencias de la Educación, mención Gerencia Educativa, Lcda. en Educación Integral, mención Lengua, Abogado. Diplomados en Metodología de la investigación y Estadística para investigadores. Investigadora activa adscrita al centro de Investigaciones de Humanidades y Educación (CIHE) de URBE. Miembro de Comité de Gerencia Educativa. Arbitro de las Revistas Telos, Marketing Visionario y Civitas (URBE). Programa Formación de Investigadores.

 

El siglo XXI trajo sus propias exigencias en este mundo globalizado, no solo en el aspecto político, económico y social, sino desde el punto de vista académico; de ahí que la preparación del docente incluya su formación científica, razón por la cual ésta se constituye en una necesidad de vital importancia en la actualidad; más aún cuando la labor del maestro abarca un sinfín de situaciones así como de actividades buscando la educación integral de niños y niñas.

En ese orden de ideas, los docentes deben poseer los conocimientos que enseñan, deben estar suficientemente versados en la educación, la pedagogía y la psicología, por ello, no deben estar alejados de los adelantos diarios de estas ciencias. No se debe olvidar que nadie da lo que no tiene, además las redes sociales son sus principales enemigos, se constituyen en el principal competidor, porque el niño y la niña pasan más tiempo sumergidos en esta realidad, es decir, éstos suplantaron la televisión y por ende, los conocimientos que ellos llevan al aula de clase muchas veces los sorprenden y se constituyen en problemas de investigación a los cuales deben buscarle solución o dar respuesta satisfactoria para los educandos.

Esto se reafirma cuando Freire (2008, p. 93) señala:

“el educador problematizador rehace constantemente su acto cognoscente en la cognoscibilidad de los educandos. Éstos, en vez de ser dóciles receptores de los depósitos, se transforman ahora en investigadores críticos en diálogo con el educador, quien es a su vez un investigador crítico”.

“el educador problematizador rehace constantemente su acto cognoscente en la cognoscibilidad de los educandos. Éstos, en vez de ser dóciles receptores de los depósitos, se transforman ahora en investigadores críticos en diálogo con el educador, quien es a su vez un investigador crítico”.

En efecto, ser buenos maestros, implica una competencia superior al nivel medio, y mejor aún de nivel superior en todos los grados de la enseñanza, por esta razón el docente debe desarrollar competencias investigativas y ponerlas en práctica en el aula de clase porque el alumno en algunos casos supera al maestro y aun sin proponérselo, muchas veces lo “desnuda” ante los avances científicos.

Desde esta perspectiva, los docentes deben estar preparados, desarrollando competencias profesionales porque la educación es una función altísima que exige adaptabilidad y acomodación como actitud humana. En consecuencia, se deben desarrollar las capacidades de investigación, formarse en el quehacer científico, forjar en los educandos la capacidad crítica.

Todo lo antes señalado permite hacer una reflexión porque hace mucho tiempo atrás el docente dejó de ser un simple transmisor de conocimientos para convertirse en un ser vanguardista acorde a las transformaciones sociales, por ello no se debe permanecer ajenos a los adelantos diarios de la ciencia porque la educación es eminentemente compleja y difícil, que, en su forma perfecta solo podría edificarse sobre el conjunto previamente acabado de las otras ciencias.

En ese sentido, cabe preguntarse ¿Cuál es el rol que se está cumpliendo como docente?, ¿solo se transmite conocimientos?, o por el contrario ¿se fomenta el proceso de investigación científica en el aula de clase?, ¿se busca el razonamiento lógico de mis estudiantes? ¿Se realiza investigación acción desde el aula y en la comunidad para darle solución a la problemática que afecta al entorno escolar?

Todas estas reflexiones llevan al docente a generalizar esta temática sobre la investigación en su quehacer educativo, permitiendo el fortalecimiento de las competencias intrínsecas y mejorando la imagen institucional, así como el desarrollo personal en búsqueda de la calidad educativa tan anhelada en este siglo XXI, y que tantas debilidades presenta en Latinoamérica.

 

Escriba un comentario

 


2 + 7 =

 
  1. yoenia hernandez

    17 enero, 2015 at 14:39

    Todo docente debe estar preparado, actualizado y motivado a los cambios que se generen en cuanto a las investigaciones pedagógicas y así cumplir a cabalidad su rol de docente preparador y guía de futuras generaciones